¿Qué relación tiene el microbioma intestinal con el control del peso?
Se ha publicado recientemente en la revista Nature Reviews Microbiology, un artículo de revisión sobre la relación del microbioma intestinal en el control del peso.
A continuación, os mostramos un resumen de esta revisión. La autoría original de esta publicación corresponde a Rachel N. Carmody y Jordan E. Bisanz.
Para comenzar
El sobrepeso, la obesidad, la desnutrición y sus respectivas consecuencias, presentan efectos muy importantes tanto a nivel de la salud personal, como desde el punto de vista de la salud pública y a nivel mundial. Los enfoques tradicionales para tratar estas condiciones mediante la dieta, el ejercicio, los fármacos o la cirugía, han tenido resultados muy dispares, por lo que existe la necesidad urgente de encontrar otras estrategias que sean eficaces y que se puedan mantener a largo plazo. Gracias a avances relacionados con la secuenciación, la bioinformática y la experimentación gnotobiótica, ahora se sabe que el microbioma intestinal está ligado al equilibrio energético mediante diversos mecanismos que afectan a numerosas cuestiones. El creciente estudio del microbioma en relación al metabolismo energético, ha puesto de manifiesto nuevas opciones para mejorar el control del peso, incluido herramientas existentes y la posibilidad de la utilización de nuevas terapias dirigidas al microbioma.
El objetivo de esta revisión
En esta revisión los autores recopilaron las evidencias actuales sobre las influencias bidireccionales entre el microbioma intestinal y el control del peso, incluidos enfoques para la investigación y para la clínica. También, los investigadores han realizado un meta-análisis a nivel de sujetos sobre los efectos de las estrategias de control del peso en la composición de la microbiota.
La influencia del microbioma intestinal sobre la ingesta energética
Los autores de esta revisión han considerado que el conocimiento emergente del microbioma intestinal está contribuyendo a poder desarrollar nuevos enfoques para contribuir a la mejora del gran reto del control del peso.
Los investigadores que han realizado este artículo indican que Los metabolitos microbianos pueden alterar el comportamiento alimentario y ponen un ejemplo muy interesante sobre la administración exógena de ácidos grasos de cadena corta (AGCC) y la reducción del apetito. Según las evidencias científicas, se cree que estos efectos se podrían ejercen a través del eje intestino-cerebro mediante una red de señalización que une los sistemas nerviosos central y entérico. En el intestino, los AGCC activan los receptores GPR41 y GPR43 de las células enteroendocrinas, desencadenando la acción del péptido similar al glucagón 1 y del péptido YY. Estas hormonas promueven la saciedad activando receptores endocrinos en el hipotálamo y el núcleo del tracto solitario (columna vertical de materia gris incrustada en el bulbo raquídeo), que procesan la información sobre el estado nutricional. Los AGCC también pueden afectar al estado de la energía mediante señales a través del nervio vago o, en el caso del acetato, atravesando la barrera hematoencefálica e induciendo la expresión de genes promotores de la anorexia.
Muchas bacterias intestinales sintetizan péptidos imitadores de las hormonas de la saciedad y del hambre, como la leptina y la insulina. Los microorganismos intestinales también pueden sintetizar neurotransmisores como el GABA, la dopamina, la acetilcolina y noradrenalina. Estos microorganismos también pueden afectar a los niveles endógenos de serotonina en el intestino y de dopamina, noradrenalina y serotonina en el cerebro. Por consiguiente, estos neurotransmisores podrían modificar la ingesta energética mediante su papel en la motilidad intestinal, la saciedad y la recompensa alimentaria.
Para profundizar
Según los autores de esta revisión, aún se desconoce si el microbioma intestinal influye en las preferencias alimentarias de las personas, pero se están observando algunos resultados interesantes en modelos animales. En comparación con los ratones convencionales, los ratones sin gérmenes de los receptores intestinales del sabor dulce presentan una mayor ingesta de sacarosa, así como una mayor preferencia por las grasas. Además, se ha observado una mayor expresión de receptores orales de ácidos grasos y una menor expresión de péptidos de saciedad.
En algunos estudios se ha observado que la microbiota fecal de ratones con obesidad inducidos por la dieta en comparación con animales receptores sin gérmenes en el caso de dietas ricas en grasas y azúcares, se ha asociado con marcadores más bajos de recompensa alimentaria. Según los investigadores, lo más sorprendente es que la colonización de la microbiota intestinal de roedores salvajes herbívoros, omnívoros o carnívoros, afectó a la ingesta de macronutrientes. Los receptores de un microbioma herbívoro seleccionaban dietas con más proteínas frente a los hidratos de carbono en una dieta basada en plantas. La microbiota colónica de los herbívoros también está limitada por el nitrógeno, lo que plantea la posibilidad de que los microorganismos manipulen el comportamiento alimentario del huésped en su propio beneficio. Por el contrario, las moscas de la fruta alimentadas con una dieta deficiente en aminoácidos esenciales prefieren determinados alimentos, lo que plantea la posibilidad de que los hospedadores también puedan tener la capacidad de seleccionar funciones microbianas beneficiosas a través de la dieta.
La perspectiva de esta investigación
La desnutrición y la sobrenutrición son cuestiones de enorme relevancia a nivel de salud pública, siendo necesario aprovechar los nuevos conocimientos sobre el metabolismo energético. Según los autores de este artículo, la manipulación del microbioma podría incrementar la eficacia de las terapias existentes y generar nuevos tratamientos, ofreciendo al personal sanitario y a los pacientes nuevas estrategias para poder controlar el peso. Sin embargo, estas cuestiones suponen verdaderos retos relacionados con la sensibilidad ecológica del microbioma intestinal, los efectos de la contaminación del microbioma intestinal, la variabilidad interindividual y los efectos pleiotrópicos del microbioma fisiología humana, entre otras cuestiones de importancia.
Conclusión
Según los autores de esta revisión, el éxito de los recientes ensayos clínicos dirigidos al estudio de las diferentes alteraciones del estado nutricional, indica que las intervenciones sobre microbioma y el control el peso, son estrategias en las que se debe profundizar. Hasta la actualidad, se ha puesto una mayor atención a la función y a los productos del microbioma intestinal en lugar de en la composición. Algunas cuestiones fundamentales para aprovechar las potencialidades del microbioma son los esfuerzos en los descubrimientos en modelos animales y en la investigación básica desde el punto de vista fisiológico para mejorar el conocimiento del fenotipo del microbioma.
Fuente: https://www.finut.org/que-relacion-tiene-el-microbioma-intestinal-con-el-control-del-peso/
