Una reciente publicación de The Lancet Diabetes & Endocrinology destaca la necesidad de redefinir la definición y los criterios de diagnóstico de la obesidad clínica. Este trabajo, liderado por Francesco Rubino y un equipo de expertos internacionales, subraya la importancia de incluir parámetros adicionales al IMC para detectar la obesidad y clasificarla como preclínica o clínica.

La obesidad y sus complicaciones representan desafíos significativos para la salud pública a nivel global, por lo que adoptar un enfoque nuevo y más preciso para la identificación de la obesidad y cambiar las percepciones sociales requerirá tiempo y esfuerzo, pero en el centro de estas propuestas está el objetivo de mejorar la vida de las personas, en donde la mitigación del riesgo será una prioridad clave, principalmente mediante cambios en el estilo de vida.

Objetivo de la publicación

Esta Comisión trató de definir la obesidad clínica como una condición de enfermedad que, similar a la noción de enfermedad crónica en otras especialidades médicas, resulta directamente del efecto del exceso de adiposidad en la función de los órganos y tejidos. El objetivo específico de la Comisión era establecer criterios objetivos para el diagnóstico de enfermedades, ayudando a la toma de decisiones clínicas y la priorización de intervenciones terapéuticas y estrategias de salud pública. 

Aspectos metodológicos de la publicación

Con este fin, un grupo de 58 expertos, que representan a múltiples especialidades médicas y países, analizaron la evidencia disponible y participaron en un proceso de desarrollo de consenso.

Principales conclusiones de la publicación

Se define la obesidad clínica como una enfermedad sistémica crónica caracterizada por alteraciones en la función de los tejidos, órganos o una combinación, debido al exceso de adiposidad. La obesidad clínica puede provocar graves daños en los órganos diana, causando complicaciones que alteran la vida y potencialmente la ponen en peligro (p. ej., ataque cardíaco, accidente cerebrovascular e insuficiencia renal). 

La obesidad preclínica es definida como un estado de exceso de adiposidad con función preservada de otros tejidos y órganos y un riesgo variable, pero generalmente aumentado, de desarrollar obesidad clínica y varias otras enfermedades no transmisibles (p. ej., diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular, ciertos tipos de cáncer y trastornos mentales). 

Los encargados de la formulación de políticas y las autoridades sanitarias deben garantizar un acceso adecuado y equitativo a los tratamientos disponibles basados ​​en la evidencia para las personas con obesidad clínica, según corresponda a las personas con una enfermedad crónica y potencialmente mortal. 

El sesgo y el estigma basados ​​en el peso son obstáculos importantes en los esfuerzos por prevenir y tratar eficazmente la obesidad; los profesionales de la salud y los encargados de la formulación de políticas deben recibir la capacitación adecuada para abordar esta importante cuestión de la obesidad.  

Para más detalles sobre esta publicación, puede consultar el siguiente enlace: https://www.thelancet.com/commissions/clinical-obesity?dgcid=tlcom_infographic_clinicalobesity25_landia